Estados Unidos estudia recortar aranceles a productos como café y banano

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, adelantó el 12 de noviembre de 2025 que el gobierno realizará en los próximos días un anuncio “sustancial” relacionado con productos como el café y el banano. La medida estaría vinculada a la estrategia de la administración Trump para enfrentar los efectos inflacionarios generados por la política arancelaria aplicada en los últimos años.

El costo de vida se ha convertido en uno de los temas centrales para los votantes estadounidenses, y el gobierno busca demostrar avances frente al incremento sostenido de los precios de bienes importados. Entre los productos más afectados se encuentran las bebidas y frutas que dependen casi por completo del comercio exterior.

Impacto inflacionario en los precios del café

El precio del café ha registrado un aumento considerable durante 2025. Según datos recientes del índice de precios al consumidor, su valor subió 21% interanual en agosto y casi 19% en septiembre. Aunque parte del incremento responde a fenómenos climáticos que afectaron la producción en países exportadores, otra proporción está directamente relacionada con los aranceles aplicados por Estados Unidos.

La administración Trump impuso un arancel del 50% a numerosos productos provenientes de Brasil, uno de los principales exportadores de café del mundo. Esta medida elevó inmediatamente los costos de importación y, en consecuencia, el precio final para los hogares estadounidenses.

La Asociación Nacional del Café recuerda que la mayoría del café consumido en Estados Unidos es importado. El país no produce cantidades suficientes para abastecer su demanda interna, por lo que depende casi por completo de mercados externos. Este escenario amplifica el efecto de los aranceles sobre los precios al consumidor.

Banano y otras frutas también enfrentan presiones de precios

El café no es el único producto encarecido por las políticas comerciales vigentes. El banano y otras frutas tropicales también han enfrentado incrementos debido a aranceles adicionales del 10% y 15%, aplicados como parte de la nueva estrategia comercial estadounidense.

Un informe del Departamento de Agricultura reveló que, en 2024, el 85% de las importaciones de banano procedían de Guatemala, Ecuador, Costa Rica y Honduras, países que han sido afectados directamente por los aranceles. Esto ha provocado un aumento significativo en los precios minoristas y ha afectado el consumo en el mercado estadounidense.

El banano es uno de los productos más consumidos en Estados Unidos dentro del grupo de frutas frescas, por lo que cualquier modificación arancelaria tiene efectos inmediatos en millones de hogares.

Posible revisión de aranceles como respuesta política y económica

En una entrevista con Fox News, Bessent indicó que el gobierno prepara un anuncio importante sobre productos que no se cultivan en Estados Unidos. Mencionó al café, las bananas y otras frutas tropicales como ejemplos claros de bienes cuyo precio está siendo presionado por la política arancelaria.

El presidente Donald Trump también adelantó que revisará “algunos aranceles” y que el país “va a permitir que entre más café”, lo que sugiere que el gobierno analiza una posible reducción o eliminación parcial de los impuestos aplicados a ciertos países exportadores.

La decisión tendría varios efectos potenciales:

• Reducción de precios para los consumidores.

• Alivio en las cadenas de suministro.

• Menor presión inflacionaria en el corto plazo.

• Reacomodo de acuerdos comerciales con países estratégicos.

El anuncio, según las declaraciones oficiales, se enmarca en los esfuerzos por sostener la narrativa de una economía sólida, especialmente en un entorno electoral donde el costo de vida influye en las preferencias de los votantes.

Implicaciones para América Latina

Una eventual reducción arancelaria tendría un impacto relevante para los países exportadores de café y banano, particularmente en América Latina. Brasil, Ecuador, Guatemala, Honduras y Costa Rica podrían beneficiarse de un incremento en sus volúmenes de exportación hacia Estados Unidos, reforzando su competitividad en el principal mercado mundial de consumo de café y frutas tropicales.

Además, la modificación de los aranceles podría incentivar:

• Mejora en precios de exportación.

• Aumento de divisas para los países productores.

• Mayor estabilidad para cadenas agrícolas afectadas por variaciones climáticas.

En el caso de Ecuador, segundo exportador mundial de banano, cualquier reducción arancelaria podría mejorar su posicionamiento en el mercado estadounidense y fortalecer su desempeño agrícola y logístico.

El anuncio anticipado por el Departamento del Tesoro se perfila como una respuesta directa a las presiones inflacionarias generadas por los aranceles aplicados en los últimos años. Productos esenciales como el café y el banano, fuertemente dependientes del comercio exterior, se han convertido en indicadores sensibles del costo de vida para los consumidores estadounidenses.

Si el Gobierno decide reducir o eliminar parte de los aranceles, el impacto podría ser significativo tanto para los hogares estadounidenses como para los países exportadores latinoamericanos. El mercado permanece a la espera de una definición que podría modificar la estructura de precios y el flujo comercial de dos de los productos agrícolas más consumidos del mundo.